Existen cinco puntos de las líneas de metro, que se abandonaron sus construcciones por distintos motivos, se trata de las estaciones fantasmas, que actualmente están algunas listas para su uso, y otras en obra gruesa, pero cien por ciento abandonadas.
La primera de ellas, estación Libertad, ubicada en el barrio Yungai, una estación terminada, con andenes y todo. Nunca se utilizó y hoy su entrada está cerrada con rejas. Tal como esta, existe también Echeverría, ubicado en la línea 4A entre La Cisterna y San Ramón, que tiene accesos andenes y obra gruesa, según Metro de Santiago, están esperando que exista demanda de gente para abrir la estación.
Por otro lado la estación Don Bosco, en Gran Avenida, nunca fue abierta porque se encuentra a solo tres cuadras de Lo Ovalle. También Cal y Canto tiene un espacio sin uso, que se dice servirá como conexión con la línea 3 cuando se construya y finalmente Baquedano con su túnel de extensión de la línea 5, quedó en desuso cuando se cambió el trazado.
Una excelente alternativa para darle un uso a estos espacios, son los que plantea la candidata a alcaldesa de Nathalie Kosciusko-Morizet quien difundió imágenes de estaciones de metro fantasmas, siendo utilizadas como parques subterráneos o espacios para la recreación de las personas.
Se trata de una serie de imágenes digitales de la estación de metro Arsenal, donde se muestra el olvidado lugar lleno de verde, con bosques interiores, o como una galería de arte, o parques restaurant, disco, teatro e incluso una piscina olímpica subterránea.
Sin duda es una excelente idea, que permitiría a nuestro país dar más opciones a los chilenos de tener acceso a lugares de esparcimiento que tanta falta hacen, y por otro lado, con una creativa forma de reutilizar espacios, más aún si son bajo tierra.
Fuente: Plataforma Arquitectura.
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