1. Reivindicador de los espacios públicos:
El espacio público es de todos y su variada posibilidad de uso es una oportunidad de desarrollo personal y colectivo. Queremos que nuestros voluntarios reconozcan en las áreas verdes esas virtudes y que aboguen por sus mejoras a fin de tener comunidades más integradas. Plazas y parques que colaboran con hacer un mejor barrio y una mejor ciudad.
2. Comprometido con los conflictos sociales en torno al hábitat y la vivienda:
Las políticas de vivienda en Chile han sido insuficientes para garantizar un desarrollo social y personal para quienes residen en barrios vulnerables. Buscamos personas sensibilizadas con el problema que aqueja a muchos chilenos que sienten que viven en lugares miserables, avergonzados de sus espacios públicos. Ese compromiso con el problema deberá ser reflejado en la perseverancia y esfuerzo en los compromisos que enfrentarás como voluntario.
3. Líder de un proceso que fomenta el cambio:
Los efectos de la transformación que realizamos en plazas y parques, son la prueba de una ciudad que requiere cambios. Esperamos que nuestros voluntarios sean voceros de ese problema y puedan con autoridad integrarse a una solución. Queremos que nuestros voluntarios entreguen capacidades en los barrios donde trabajamos y que lo hagan reflejando el convencimiento de un cambio necesario.
4. Empáticos con los vecinos, quienes motivan nuestra intervención:
Si bien el cambio más reconocible en una intervención de Mi Parque son las áreas verdes, el impacto que buscamos en ese trabajo es transformar comunidades. Hay muchas personas detrás del trabajo que hacemos. Esos beneficiados no sólo contarán con un espacio que eventualmente les servirá para jugar, hacer deporte, o reunirse a conversar con sus vecinos, también esperamos que sea una razón para que se sientan orgullosos del lugar en el que viven. Esperamos que nuestros voluntarios estén atentos a las necesidades de estas personas, puedan reconocer su vulnerabilidad y quieran generar mejoras en sus vidas.
